frágil y rompible el cuerpo
cada medio día
es de noche

si de metal
si de cobre
la libertad
de la estatua

quizá me gusten las estatuas murientes

una mentira en la cara y
la cara de la mentira
 por mí
rompan los espejos y
las puertas de los baños

la pequeña bestia

la gran bella


juntas no bailan el vals

careta estoy tranquila camuflada
nunca en paz,
tengo mi atuendo sexy mi
mirada bélica mi
llena de barro
nuestras próximas muertes

la llegada de la primavera me hace acordar a la primera vez que nos besamos,
estuvimos toda la tarde hablando de proyectos, teníamos trece años y fue de despedida.

los ánimos contradictorios

soy una piba epistemológica
dermatológicamente entregada
al último sol de invierno
y las oportunidades

el vacío
pudo ser interesante
proporcianalmente a
aguantarme el vómito

la batalla no puede ser inteligente
salvo que uno no tenga planes


los gritos y los disparos me desconcentran

declaro enemigos nulos

algún dios no me dio
un espíritu que hable de gente
usando lenguaje para hablar de cultura
apellidos claves para hablar de política
y me siento disminuída
hacer
no puedo hacer nada
pero decir? , decir?
tampoco y entonces
las distopías

la gata blanca espera del otro lado de la puerta del patio hasta que le abran: no pide.
algunas veces dormirmos hasta muy tarde y entonces ella está muchas horas
algunas de esas veces llueve o hace frío
lo que la hace más hermosa es su actitud salvaje
y que no la quiero tanto como al gato negro,
que sabe maullar claramente.

diecisiete de septiembre

ya pensé en el antiguo testamento
.......................cuando era chica
la hostia mojada en vino
era un privilegio que detestaba

si el hueso se despega de la carne que lo tiñe
puedo imaginarlo

siempre que imagino calavera
me parece que es de mármol
o de cualquier otra cosa
lo llamo
miedo a mi cuerpo

me puedo esconder en la cama

deseo

que mi silueta llena se disuelva

para que nadie me encuentre temprano
más vale nunca

cuando salga el sol esta noche
la luna se va a sentir
(imagino)
tranquila como la muerte
en el cementerio florido.

el negro contra el verde del pasto
los pájaros azules
las flores rojas
me hacen pensar en la fuerza del sol
en los siete colores
y olvido la luna
blanca

Estábamos viendo una película donde las personas se cortaban
en pedacitos
se hacían
rebanadas de venas y se observaban  en muertes lentas.
Las encías
sangraban sobre el blanco de los dientes duros,
la pantalla proyectaba rojo
Una vez él dijo
que lo malo de mirar una película era que luego quedábamos a oscuras
y le gustaba mirarme.
Esta noche el rojo parecía perfecto para estar cogiendo

––mi

amor

no puedo
dejar de pensar en sangre

las mujeres hermosas
los fenómenos telúricos
los dolores de huesos
la lengua pegada contra el helado
el instante en que el perro
hace la gracia...
necesito una cámara
que filme

un pajarito iba volando

me ha parecido muy bien tu idea
de volverme un tanto arcáica
incluso en el lenguaje,
pasaba por ahí
esa vía.

en una época flashaba corazón
arte y literatura en
decir
te amo
te cojo
todas esas forradas

una elefanta
se llamaba peluza


(te lo advierto
por si tu perro negro se llama negro
o tu gato mish)

al final creo que correría como heidy detrás tuyo
ese es mi concepto de pureza
se

o un chanchito cupido

hoy me llamó por mi nombre
por primera vez mientras yo
meaba

de veras te has lucido con la bebida cola
allí en el motel de esa carretera


basta, quiero un sailor

.. mmm me estaba imaginando que íbamos a desayunar
at tiffanys

oiga superextático
en esa nave espacial
pasan lentos

sentado en la uña del dedo de una mano sacada por la ventana

el mejor amor

siempre empezando por
la imposibilidad
la gran obra

no tenías ganas
y yo podía acercarme a vos
copiando y pegando fragmentos
de intelectuales
pero vos no tenías ganas
de leer y me acordé de las
monografías
me acordé de esas veces en que
lo importante es que a uno lo aprueben
a costa de haber citado
todos los días todo
hasta la entrega,
me acordé de no haber intervenido
en mis aprobados
quizá no puedo
hablar todos los días todo

hace un rato mis deseos eran órdenes
estaba sola en el concierto
estabas

fue esa última botella
la que dejaste antes de entrar
es que ibas caminando rápido
y yo, como podía, detrás tuyo
no hicimos tiempo a tomarla
debíamos estar muy ebrios
agarrar la botella por el pico
golpearla contra el cordón
y amenazarnos
no importa quién a quién
al menos sería romántico

velada y de rojo
incluso los labios pintados
incluso las pestañas gruesas
y las medias translúcidas de estreno
fui a la fiesta de los mejores hombres
aquellos los hermosos
viriles sociables y altos
los músicos y los bohemios
me gustan las mujeres

frívolo siniestro

creo en ese espacio
lineal
blanco

decías
que cerrabas la persiana
para más intimidad

y una vez
nos fuimos a dormir al mediodía
recuerdo
balancearme boca arriba
ver mis pies

la luz entraba por
el espacio blanco

nos dieron sombra
decenas de ojos,
los invitados que iban a tu casa


un amigo tuyo sabía
de mis marcas en la espalda
la vecina había escuchado
el orgasmo

de noche el barrio estaba oscuro
pero el fantasma estaba adentro

mi recuerdo es fino
milimétrico
como la pupila de un ojo
tuyo
de vos contra la almohada
una mañana

pasaron muchas horas desde el desayuno

y quiere levantarme

como si fuera un muerto

y tengo que decirle

te quiero

puedo sola

para que retroceda

y yo miro en el espejo

y luego en la ventana

las plantas arrancadas de las macetas

la tierra en pedacitos

las uñas sucias

el vestido de anoche con el perfume intacto

todavía puesto

dónde dormiste anoche?

: en esta cama

y qué

pasó

con

los

helechos