Wednesday, December 21, 2011

mueca

Hace un mes que frecuento la hamaca de la plaza.
Descubrí mi vértigo y quise sacármelo,
ahora me recuesto, cuelgo de cabeza y miro las luces de calle siete como si colgaran, y siento el peso de mi pelo y el peso de mi sangre hasta mi nariz y me respeto dada vuelta y lo respeto todo.
Entorno los ojos y lo deformo sin hacernos nada. Me agarro con fuerza hasta que se marcan las manos de óxido naranja.
Me limito a achinar la vista, a romper mis sentidos... pero no manipulo y no hago ningún ruido, no dejo ninguna huella en el mundo. Me lleno de huellas psíquicas, tomo-bailo-me encanta estar con vos
y cuando vuelvo a casa el mundo es el de siempre y tengo que usar anteojos.

No comments:

Post a Comment